Política, lengua y literatura

Se me ocurren muchas cosas que comentar sobre las elecciones de ayer, demasiadas.  Por eso voy a dosificarlas y con un poco de suerte (para ustedes y para mí) me dejo en el tintero alguna.

 

Lo primero es lo primero, lo que a mí me interesa: la lengua y la literatura.

 

1.- La metáfora de la oscuridad:  

Pasados unos treinta o cuarenta minutos de conocerse los resultados en Génova y Ferraz se apagó literalmente ergo metafóricamente la luz.  "Apaga y vámonos", dirían los dos candidatos, haciendo ya las maletas con destino Bruselas.  

 

2.- La paradoja:  

Dijo Cospedal que el Partido Popular había tomado medidas antipopulares.  Gracias, me ha preparado media clase.

 

3.- La redundancia:

Esta misma dirigente dijo cinco veces en un minuto que el Partido Popular había ganado las elecciones.  Luego pasaron a la metáfora comentada en el punto 1.

 

4.- Las oraciones transitivas:  

Son aquellas que necesitan un objeto o complemento directo.  No es gramaticalmente correcto decir * "Ayer iba por la calle y encontré".  Ese partido, que yo creí que lucía un círculo zen como logo (era muy tarde y mi vista ya no es lo que era), necesita que la población conozca el objeto directo de su verbo, "podemos".  ¿Qué pueden?  Luego localizaremos los complementos circunstanciales (¿cuándo y cuánto?). 

 

5.- Autorretrato:

Lo mismo anoche fue una noche histórica y ni siquiera nos hicimos un selfie.

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