Conciertal neoclásico

Como no hay dos sin tres, tampoco hay tres sin cuatro.

 

El primer conciertal de este año tan conciertalero fue a principios de mayo en el Centro Internacional de Español de la Universidad de Málaga.  Allí se estrenó mi nuevo bajista, José Luis González Vera, escritor, poeta, columnista y docente.  Aquel acto no fue propiamente la presentación de De la palma al cerezo, sino un conciertal que me pidieron con motivo del septuagésimo aniversario de su creación.

 

El segundo fue el oficial, de la mano de José A. Mesa Toré, alma mater de todo este asunto de las obras completas, al que tengo tanto, tantísimo que agradecer.  Allí estuvo también el ínclito, el de los dedos vertiginosos, Eduardo Retamero, cantando y tocando según mis tiránicas instrucciones.  Y también, para muchos, lo mejor de la tarde, la composición e interpretación de Cantos cetáceos, una pieza pianística de la compositora Cristina Gallego Fernández, que dejo al público con ganas de más, de mucho más.

 

El tercero fue un concierhaiku (por el espacio, no por el tiempo) que celebramos en La Mínima, una librería grande de corazón, sita en el Rincón de la Victoria.  Allí el que se estrenó fue el presentador, que me emocionó especialmente con esa mezcla especial de cariño, erudición y sentido del humor, Fran Cuevas Alzuguren.

 

Y ahora llega el cuarto. Muchas y muchos (bueno, no tantos ni tantas) se preguntarán por qué, a qué diantres viene tanto presentar un libro (que además no se puede comprar) y que ya ha sido presentado dos veces.  Pues porque hay gente que no ha podido asistir a los anteriores, a saber: emigrantes, estudiantes, diletantes, distantes, amnésicos, estresados... que han manifestado su intención de querer haber ido, pero que no pudieron.  Doy fe.  También son las ganas que tiene/tenemos gran parte del personal de salir de sus casas y patear la calles nuevamente.

 

Así pues, el jueves 2o de julio a las 20:00 horas, con el permiso de la autoridad y si el tiempo no lo impide (que no lo impedirá, porque hay aire acondicionado en la sala), estaremos González Vera, Eduardo, Cristina, dos invitados más (en la presentación y las voces) y este que les escribe, en el incomparable y neoclásico marco del Ateneo de Málaga, sito en calle compañía, casi ya plaza de la Constitución.

 

Se remozará el repertorio de poemas y canciones.  Entrada libre hasta completar aforo, que no se completará (demasiado salón regio para un poetastro alopécico).

 

Esperamos verlas y verlos por allí.